En esta sexta entrega del texto de investigación de Iskra Sabino Las cruces de mayo en Alvarado, Iskra nos da las claves -mediante el análisis de las nociones "multiculturalismo" y "pluralismo"- para entender la transformación de la memoria ligada a la tradición de las cruces de mayo.
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Las cruces de mayo en Alvarado: Entre lo tradicional y lo actual, el devenir cultural de Alvarado
Iskra Sabino
(Sexta entrega)
Capítulo IV.
La inclusión de Alvarado al mundo globalizado y multicultural.
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Encierro de Burros, Alvarado, Veracruz. Foto: Agencia Cuartoscuro |
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4.1 Multiculturalismo y pluralismo
En la actualidad, es muy común escuchar términos como:
multiculturalismo o pluralismo, estos dos conceptos, que nacen junto
con las necesidades de definir a las nuevas sociedades, surgen con la
época capitalista, donde la globalización afecta los rincones más
lejanos e inimaginables. Pero el estudio correcto de estos dos
vocablos puede llegar a dar algunas de las respuestas que se buscan,
a veces desesperadamente, para dar solución a los diversos fenómenos
que afectan a las nuevas ideologías dentro del campo del respeto y
la tolerancia social, y a todo aquello que es diferente al “otro”,
este fenómeno, el de la “diferencia”, ha menoscabado a
determinadas sociedades durante su proceso histórico y ha influido,
de manera determinante, en diversas culturas. Es entonces que estos
sucesos pueden ser explicados por medio de nuevas teorías, como el
estudio que realiza el sociólogo Giovanni Sartori en su libro
La
sociedad multiétnica
y por el investigador en filosofía, León Olivé que en su texto
Multiculturalismo y Pluralismo,
nos entrega una nueva propuesta multiculturalista. Pero antes de
dar inicio a este apartado, habría que comenzar por definir lo que
no es multicultural. El vocablo mulpiculturalismo nos remite a pensar
en la existencia de muchas y variadas culturas; pero la palabra
“cultura” también puede relacionarse con la identidad
lingüística de una población, la identidad religiosa, la identidad
étnica y hasta la identidad sexual para las feministas. Para
Giovanni Sartori estos ejemplos demuestran que no todo lo que se
dafine como cultura lo es, pues la diversidad cultural nada tiene que
ver con la diversidad étnica, ya que una no define a la otra y
viceversa.
Para entender esto de forma más clara, habría que hacer una
revisión de cómo utilizamos las palabras para definir ciertos
contextos o circunstancias, así que se tendría que ir directamente
a un diccionario a buscar el verdadero significado de los términos
que usamos cotidianamente para comunicarnos. Desafortunadamente, las
personas utilizamos palabras que normalmente no entendemos o más
bien, creemos saber cuál es su función; debido a estos malos usos
del lenguaje las palabras o conceptos se van distorsionando, hasta
perder su verdadero significado y la palabra “multicultural” es
una de ellas. Las diferencias que existen entre las palabras
multirracial y multiétnico, advirtiendo que multirracial proviene
del griego y la segunda es una palabra que se ha utilizado en la
modernidad. Para muchos, estos dos conceptos podrían ser semejantes,
pero dentro de la evolución lingüística la concepción de “etnia”
llega a ser más extensa que el de “raza”.
Una identidad étnica no sólo
es racial sino también una identidad basada en características
lingüísticas, de costumbres y de tradiciones culturales. En cambio,
una identidad racial es en primera instancia una (más estricta)
identidad biológica que se basa, para empezar; en el color de la
piel. Por otra parte, raza es también un concepto antropológico que
sobrepasa, como tal, el de etnia. Por tanto, hoy por hoy la
distinción es sobre todo ésta: que el predicado “étnico” se
usa en sentido neutral, mientras que “raza” y racial suelen ser
calificaciones descalificantes para uso y consumo polémico.
Después de haber argumentado y diferenciado sobre lo que
significa ser “multicultural” y “multirracial”, se continuará
con la definición, por medio de la teoría sartoriana, los
contrastes que existen entre: pluralismo y multiculturalismo, que
generalmente son vistos como analogías o por el contrario, como la
negación el uno del otro. Primero se tiene que tener en claro que el
pluralismo expone una situación, que puede ser la forma en la que
nos relacionamos con otros individuos y mientras que el
multiculturalismo se refiere a la condición con la que nace cada
sujeto. Giovanni Sartori argumenta que el pluralismo es el término
que mejor explica la sociedad abierta, y con esto habla de una
sociedad libre, por ser este el conceppo que mejor define las
creencias de valor y los elementos que han forjado históricamente
este tipo de sociedades.
Desafortunadamente el pluralismo es una palabra que se ha puesto de
moda, como muchas otras, pero que en realidad se desconoce su
verdadero significado y que en la actualidad no satisface las nuevas
necesidades sociales. El pluralismo comienza con Arthur Bentley en
The Process of Government en 1908.
Sartori subraya que pluralismo no es sinónimo de pluralidad, por eso
distingue tres niveles de análisis: el pluralismo como creencia; el
pluralismo social y el pluralismo político.
El primero alude a la diversidad y no a la igualdad, al disentir y no
a la solidaridad, al cambio y no al pasivismo. Pero el pluralismo
trata cualquier identidad, ya sea esta voluntaria o involuntaria de
la misma manera, entonces si no existe un respeto a esa pluralidad no
existe el pluralismo como tal. En el pluralismo social encontramos
que no existen sociedades iguales, excepto en la concepción utópica
del mismo término, ya que las sociedades se diferencian unas de
otras por diversos motivos, ya que son un tipo específico de
estructura social. En el campo de la política el término
“pluralismo” apunta hacia la pluralidad grupal que a su vez es
independiente y no posee ningún rasgo de exclusividad. Aquí Sartori
muestra cómo estas partes se han transformado en partidos políticos
dentro de los cuales surge un conflicto entre el reconocimiento de
los significados de consenso y conflicto. “Por tanto debe quedar
claro que el elemento central de la Weltanschauung pluralista no es
ni el consenso ni el conflicto, sino, en cambio la dialéctica deljdisentir, y a través de ella un debatir que en parte presupone
consenso y en parte adquiere intensidad de conflicto, pero que no se
resuelve en ninguno de estos dos términos.”
Para éste sociólogo el principio esencial es el consenso que
acontece a partir de la aprobación de las reglas y su resolución
ante los conflictos. Asimismo, no se debe pensar que el término
“consenso” tiene alguna semejanza con la unanimidad, ya que el
consenso pluralista tiene que ver más bien con un proceso entre
mentes e intereses que son discordantes. “Consenso es un proceso de
compromisos y convergencias en continuo cambio entre convicciones
divergentes”.
Ahora bien, en la sociedad multiétnica de Sartori el pluralismo y el
multiculturalismo no son conceptos opuestos pero depende del valor
que se le atribuya a cada una de estas concepciones que la lectura
del discurso cambia. El multiculturalismo es visto, a grandes rasgos,
como la existencia de la multiplicidad de culturas y se define como
una posibilidad del pluralismo. Pero si al multiculturalismo se le da
el grado de valor, nace un conflicto que lo hace entrar en pugna con
el pluralismo:
El pluralismo nace en un mismo
parto con la tolerancia y la tolerancia no ensalza tanto al otro y a
la alteridad: los acepta. Lo que equivale a decir que el pluralismo
defiende, pero también frena la diversidad. Para el pluralismo, la
homogeneización es un mal y la asimilación es un bien. Además, el
pluralismo, como es tolerante, no es agresivo, no es belicoso. Pero,
aunque sea de manera pacífica, combate la desintegración.
Por otra parte, el multiculturalismo presenta dos
interpretaciones. La primera habla de un multiculturalismo que se
encuentra subyugado ante los preceptos del pluralismo. Y la segunda
es la que se vive en la actualidad, donde se puede interpretar una
situación totalmente diferente, ya que el multiculturalismo se ha
convertido en la negación del pluralismo. Los orígenes de ésta
nueva concepción multicultural se desprenden de las ideas marxistas,
y es que antes de ser adoptado por los intelectuales americanos, ya
había surgido con los neomarxistas ingleses, que estaban
influenciados por Foucault. Esta nueva forma de multiculturalismo
suple la lucha de clases anticapitalistas por la lucha cultural
anti-e
stablishment.
Después de realizar este planteamienpo sobre ha ideología
sartoriana, queda claro que, al nacer dentro de un ámbito cultural,
donde adoptamos una posición simbólica, porque el hombre, según el
significado antropológico, es un “animal simbólico”,
debido a que nace y se desenvuelve en un mundo que está repleto de
simbolismos, debe comprender que de las civilizaciones emanan otras
nociones de cultura, ya que la palabra misma lo especifica. Habitamos
un mundo en el que las culturas son muchas y la cultura puede
representar a una entidad lingüística, religiosa, étnica o
sexual.
Y en el que, por lo tanto, los símbolos son tan diversos y se
construyen desde múltiples parámetros. León Olivé define dos
conceptos de multiculturalismo: el factual y el normativo. El
primero se refiere a las sociedades multiculturales como es la
situación de México, Perú, Bolivia o Ecuador entre muchos otros
países del mundo que presentan entidades en las que cohabitan
distintas culturas. El segundo está relacionado con los estándares
sociales, los cuales son tomados como modelos para realizar acuerdos
y llevarlos a la praxis por los representantes de los Estados e
integrantes de las diferentes culturas, así como de fracciones
políticas, de los ciudadanos en general, de organizaciones no
gubernamentales y de organismos internacionales en materia de
políticas culturales.
Lo cual implicaría un proceso de modelización y de un intento de
planeación cultural. Los esquemas que plantean estos grupos
comprenden proyectos sobre las culturas, sus funciones, sus derechos
y obligaciones. De esta forma se idea todo un programa que plantea la
manera en la que se deben dar las relaciones entre las culturas y los
individuos y por consiguiente, entre las diferentes culturas.
León Olivé apunta que, debido a las diferencias entre las
sociedades multiculturales el modelo o tipo a seguir no es el mismo
para todas, así que, se debe de encontrar un estándar que se adecue
mejor a cada sociedad:
Joseph Raz ha distinguido entre
dos tipos de países multicultqrales. En un caso, las comunida`es
cuentan con territorio propio y viven en zonas geográficas
claramente delimitadas; como los quebequenses en Canadá, o los
escoceses en Gran Bretaña. En otros casos, comunidades muy
diferenciadas, como las de los chicanos, los hispanos y los negros,
en Estados Unidos, comparten muchos espacios públicos y servicios
con el resto de la sociedad, sin que exista la separación
geográfica.
Will Kimlicka ha distinguido
entre «Estados multinacionales», es decir, aquellos en los cuales
coexisten una o más naciones dentro de un único Estado (por ejemplo
España o Suiza), y Estados «poli étnicos», a saber, aquellos
compuestos por diferentes grupos de inmigrantes, provenientes de
culturas diferentes y que mantienen, hasta cierto punto, algunas
particularidades étnicas. Éste es típicamente el caso de Estados
Unidos.
Para Raz y Kymlicka existen grandes diferencias entre las
fronteras de estos dos tipos de multiculturalismo, pero que no
determinan su contexto multicultural, ya que su existencia encaja en
varios de los puntos que a su vez son
intermedios dentro de este
constante buscar la mejor opción para el derecho a una mejor
convivencia, que nace a partir de nuestras diferencias culturales,
sociales, religiosas e ideológicas.
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XnAhora bien, León Olivé habla de un pluralismo basado en la
posición filosófica constructivista de la obra de Thomas Kuhn,
también puede llegar a tomar el nombre de constructivismo kantiano,
porque se ha fundamentado en algunas de las ideas de éste filósofo.
Con la obra de Kuhn se reconoce el regreso de la epistemología
dentro de las comunidades científicas y las comunidades en general;
de esta forma se pueden explorar los modelos conceptuales y las
prácticas sociales.
Dentro de esta misma línea, Kuhn le da continuidad al pensamiento de
Ludwick Fleck,
La génesis y el desarrollo de un hecho
científico,
sobre el cual su autor hace referencia a la siguiente tesis:
Los hechos cinéticos tiene una
génesis y un desarrollo, los hechos científicos no son dados ni
tienen una existencia independiente de lo sujetos, de sus prácticas
y de sus aparatos cognoscitivos y herramientas conceptuales. Los
hechos son construcciones; en las tesis de Fleck y de Kuhn, son
construcciones sociales, son construcciones en las cuales siempre
participa una comunidad, y no individuos aislados.
La teoría principal del constructivismo se centra en la siguiente
idea: “los marcos conceptuales tienen una fuerte implicación
ontológica: son constitutivos de los objetos de conocimiento, y el
mundo formado por esos objetos, como dice Kuhn, es lo que en general
se llama, ‘el mundo real’”.
Esta breva introducción sobre al constructivismo es necesaria
para poder entender el concepto de
pluralismo, ya que según
esta teoría la existencia no es más que la consecuencia de las
suposiciones que admitimos y de las experiencias que llevamos a cabo.
Así que este tipo de constructivismo se puede definir como
devastador. Pero existe otra descripción de éste mismo concepto
que no cae dentro del
relativismo extremo y que se apega mucho
más a la definición pluralista que buscamos para explicar los
problemas que afectan a los individuos que integran una misma
comunidad: el
constructivismo fundamental.
Este tipo de constructivismo propone, de cierta forma, un tipo de
realismo que establece el modelo multicultural que se desea
definir.
La tesis constructivista
fundamental es entones, que el contenido del conocimiento y de las
teorías científicas está determinado por el marco conceptual y el
paradigma que comparten los miembros de una comunidad, el que
presuponen en sus prácticas y en sus aproximaciones a la realidad
para conocerla y para interactuar con ella. Por ejemplo, para
transformarla.
De acuerdo con esto, lo que al constructivismo expone es que el
mundo sensible, el cual está construido por hechos y objetos, es
totalmente diferente para todas las culturas ó para las comunidades
científicas, pues la interpretación de éste
mundo depende
de los medios conceptuales con los que cuentan esas culturas o
comunidades y de los métodos que utilizan para adquirir su
conocimiento. Lo que pretende León Olivé al combinar el
constructivismo con el pluralismo es mostrar que existen otras formas
de conocer la realidad y que cualquiera de estas prácticas es
válida:
El meollo de la concepción
pluralista con respecto al conocimiento es que existen diferentes
maneras legítimas de conocer la realidad, por medio de
las
prácticas y de los recursos cognoscitivos de los seres humanos. Esto
supone admitir una realidad que es el objeto del conocimiento, pero
se trata de una realidad que se «deja» conocer de muy diversas
maneras, aunque no de «cualquier» manera.
El pluralismo, para Olivé, representa la realidad desde una
óptica específica, en la que intervienen intereses y propósitos ya
estipulados, y para la que no existen razones que lleven a pensar que
deben aproximarse a una representación única. En este texto expone
que el conocimiento no está relacionado únicamente con las
prácticas, ya que los conocimientos de los seres humanos son
totalmente distintos. Por lo tanto, estas diferencias vuelven
imposible la existencia de una teoría del mundo que muestre una
verdad absoluta. “El pluralismo rechaza, pues, la idea de que
exista, de hecho o potencialmente, una única representación
completa y verdadera de la realidad a la cual deban acceder todos los
seres humanos, ni siquiera a largo plazo, sea cual sea la cultura o
la comunidad epistémica a la que pertenazca.”
León Olivé para comprender, más claramente, cómo se relacionan el
constructivismo y el pluralismo, ejemplifica el mundo como conjunto
de objetos y de relaciones que se complementan, que a su vez se
encuentran instituidos por los esquemas y las prácticas que llevan a
cabo los integrantes de ciertas comunidades con la realidad. Esto
lleva a que la tesis pluralista asevere que este conjunto de
prácticas y de esquemas conceptuales, que son determinados por las
diferencias que existen entre las culturas, son heterogéneos. Así
que la teoría pluralista afirma que existen
diferentes mundos de
hecho, que por lo tanto, pueden exponer un conocimiento legítimo
de la realidad, pero que es imposible creer que describan una verdad
absoluta de ella. Después de esta breve interpretación sobre el
análisis pluralista, se debe aclarar que cuando se habla de respeto
social y cultural no necesariamente se tiene que hacer referencia
inmediata a una posición pluralista, ya que el pluralismo no habla
de pluralidad y como ya se mencionó anteriormente, el pluralismo es
una situación que no tiene opción, se tiene que acatar como una
regla determinante, sobre todo en la manera en la que nos
relacionamos con otros individuos. Así que para realizar un
análisis, estudio o investigación acerca de cualquiera de estos dos
nuevos conceptos, que en realidad no lo son tanto, se deban de
conocer, a la perfección, las características que los hacen tan
diferentes.
El multiculturalismo, hoy en día, es la voz que se pronuncia por
una nueva ideología, es el deseo que intenta razonar las diferencias
por medio del reconocimiento de la autenticidad; de la identidad y
sobre todo, de la diferencia. Y es tomando como base estos valores
multiculturales que la sociedad alvaradeña debe aprender a entender
cómo cada individuo concibe de diferentes formas las tradiciones. Es
un hecho que la sociedad se concibe, a sí misma, como un conjunto de
individuos que están regidos por reglas, creadas por ese mismo
círculo social, y que es el deber de cada uno acatarlas de la misma
forma. La simple idea de que alguien se salga de los parámetros
establecidos inicia un conflicto. Pero también la necesidad de
progresk y de cambio se ha acentuado sobre la posibilidad de cambios
constantes, el conocimiento, las costumbres que se hacen diferentes,
el uso de tecnologías novedosas, la instauración de universidades,
todo eso implica cambios que fundamentan una modernidad en constante
movimiento.
Por otra parte, hay una visión tradicionalista que se puede
ejemplificar con la forma que tienen los adultos mayores de proyectar
su legado histórico-cultural, y que debido a su experiencia de vida
son considerados, por muchos, como los sabios del lugar. Puede ser
real que estos sujetos conozcan mejor que nadie la historia de su
lugar natal, pero eso no significa que entiendan que el respeto a las
nuevas visiones, sobre todo de las nuevas generaciones, es el
elemento que los podría conducir hacia una vida marcada por la
tolerancia y el respeto.
Es así que los maestros, que en realidad fueron los que
enriquecieron con sus opiniones el video-documental que presenta esta
investigación, sean los principales encargados de difundir el
respeto y la conciencia de las tradiciones que caracterizan esta
comunidad. Pero también es importante que ellos sean consientes deXnque el respeto hacia la diversidad es un valor que ellos mismos
tienen que adoptar como un nuevo valor, que se va marcando cada vez
con mayor firmeza en este nuevo siglo.
(CONTINÚA EN LA SIGUIENTA ENTREGA)
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Notas 3.2