29 de septiembre de 2008

Intermedio


Portada del libro Migración, redes transnacionales y envejecimiento. Estudios de las redes familiares transnacionales de la vejez en Guanajuato, editado por la UNAM a través del Instituto de Investigaciones Sociales, coautoría de Verónica Montes de Oca, Ahtziri Molina y Rosaura Avalos.
http://www.iis.unam.mx/catanuevo/montes2.html

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22 de septiembre de 2008

Ideas para la iniciativa de Ley de Cultura: usos culturales del espacio urbano

El día de hoy, compartimos con ustedes las reflexiones y propuestas sobre usos culturales del espacio urbano de Brenda Galván López. Ella es arquitecta y doctorante en Arquitectura y Protección del Patrimonio en la Universidad de Newcastle, en Inglaterra. Es un gusto contarla entre nuestros bloggeros invitadas a discurrir sobre la iniciativa de Ley de Arte y Cultura para el Estado, deseada y necesaria...

Ideas para la iniciativa de Ley de Cultura:
usos culturales del espacio urbano

Brenda Galván López

Las ideas que a continuación se exponen buscan contribuir a la Iniciativa de Ley de Cultura en el Estado de Veracruz. Este interés surge a partir de experiencias vinculadas con proyectos urbanos que afectan nuestras ciudades y las manifestaciones culturales existentes. A continuación se exponen algunas consideraciones relacionadas con: 1) el uso y apropiación de los espacios públicos como lugares de prácticas culturales, 2) la creación de mecanismos que fortalezcan las manifestaciones culturales existentes y 3) la consideración de la ciudad pensada para sus habitantes, productores de cultura.

1)
El acceso libre a la ciudad es uno de los derechos prioritarios de cualquier ciudadano. El uso de los espacios públicos hasta hace algunas décadas no se consideraba como tema de discusión en relación a su uso libre. Sin embargo, hoy es relevante porque la creación de las áreas públicas para la convivencia es casi nula y en cierta medida la aparición de las plazas comerciales (entre otros espacios de consumo y recreación) se han generalizado como espacios de encuentro.

Además los espacios públicos, como calles, plazas o parques urbanos que existen actualmente se ven amenazados por una tendencia que los perfila como espacios de consumo para el goce de unos cuantos. Por este motivo es necesario crear mecanismos que faciliten el libre acceso físico y psicológico a estos espacios para que puedan ser usados y apropiados por el mayor número de personas posible. Así pues, será posible incluir desde la población más joven a la de edad mas avanzada en donde hombres y mujeres se sientan de igual manera bienvenidos. La consideración de estos lugares como espacios incluyentes es relevante como ejercicio práctico y directo de una sociedad democrática. La trascendencia cultural del uso de los espacios públicos es que sirven como lugares de producción y práctica de varias manifestaciones artístico-culturales contemporáneas.

2)
En cuanto a las manifestaciones culturales que toman lugar en los espacios públicos, pueden ser generadas en dos maneras (sin descartar otras formas): a) por los propios integrantes de comunidades que llevan a cabo actividades con valores e intereses compartidos, y b) por las instituciones que trabajan bajo determinadas estructuras en favor de las actividades culturales. Es necesario que entre ambos grupos exista un dialogo para el logro de acuerdos. Esto permitirá fortalecer los intereses de la comunidad y su sentido de pertenencia. Además de que se podrá dar continuidad a las manifestaciones culturales actuales sin que sean impuestas o devenga un escaparate de actividades carentes de contenido social, donde la mayoría de la población se sienta ajena a esas actividades. Es importante evitar en la población el aumento de una actitud pasiva y contemplativa y provocar, por el contrario, una activa y propositiva.

3)
Por otra parte, existen muchos intereses vinculados a la cultura, y uno de ellos es el del turismo cultural. Si bien es cierto que este aspecto es importante, también lo es reflexionar que la ciudad antes que nada, pertenece a aquellos que la habitan. Por lo tanto, las manifestaciones culturales existentes deben ser pensadas en beneficio de ellos mismos. Si se considera apoyar de manera estratégica las iniciativas locales desde las esferas políticas para asegurar su continuidad y fortalecimiento, existe menor riesgo de la desaparición de las mismas y mayor autenticidad en sus prácticas, lo cual además de todo agrega valor a la oferta turística.

Lo que pasa en los espacios públicos de las ciudades muestra parte de nuestra cultura. Veracruz es afortunado ya que muchos lugares cuentan con grupos locales orgullosos de sus prácticas culturales. Es importante que esta iniciativa de ley considere mecanismos de diálogo y trabajo en conjunto. Además de que se considere la importancia del libre ejercicio de las manifestaciones culturales en los espacios públicos dentro de una convivencia incluyente y un ambiente de confianza y tranquilidad.

8 de septiembre de 2008

¿Qué Ley de Cultura quiero?

En esta ocasión, y siguiendo con el tema de la legislación cultural, invitamos al músico y promotor cultural Gilberto Gutiérrez, fundador y director del grupo Mono Blanco, a que participara reflexionando sobre lo que desde su punto de vista tendrían que tomar en cuenta los legisladores a la hora de crear una Ley de Cultura.

Agradecemos a Gilberto su disposición para este ejercicio, y esperamos que no sea la última vez que colabora con nosotros.

¿Qué Ley de Cultura quiero?
Gilberto Gutiérrez Silva

Como promotor y creador cultural, considero que la cultura tradicional guarda una gran importancia en la identidad individual, de la nación y de la patria.

En el caso de la música tradicional, que conlleva la danza y la poesía, me parece que lo más importante es que se establezcan un conjunto de leyes que apoyen a quienes las practican y por ende las mantienen, especialmente en la actualidad donde la cultura tradicional tiene que competir en desventaja con la cultura de gran consumo comercial que imponen los medios de comunicación y donde no hay espacios para manifestaciones que no venden a gran escala, como aquellas más enraizadas en la tradición. Los únicos medios de comunicación que dedican algunos espacios a la vasta cultura tradicional no tienen alcance nacional en los medios abiertos y solamente acceden a estos espacios quienes tienen, por ejemplo, televisión de paga o pueden desplazarse para apreciar en el lugar mismo fiestas tradicionales, festivales o eventos en las comunidades.

A mi parecer, una Ley de Cultura que favorezca el desarrollo de las expresiones artísticas ligadas a las culturas tradicionales debería tomar en cuenta las siguientes consideraciones:

• Que se considere dentro del marco jurídico la existencia y el desarrollo de espacios culturales autogestivos, entendiendo que su finalidad no es generar ganancias ni ser proyectores de las funciones del gobierno, y encontrando mecanismos que no los sometan a tener una infraestructura de operación igual a las de las grandes empresas o corporaciones.

• Que a los músicos que se dedican a la tradición se les dé trato preferencial a nivel fiscal, o por lo menos se consideren sus diferencias en la calidad y cantidad del ingreso, y que la Secretaría de Hacienda no les dé el mismo trato que a las estrellas de Televisa o de los grandes circuitos comerciales.

• Que se abran espacios en los medios dedicados la música tradicional mexicana, entendiendo que si no existe un escaparate que muestre las manifestaciones de las culturas locales, no podrá crearse un gusto y un público que, más allá de volverlas fenómeno de consumo, permita que los músicos que se dedican a esto puedan vivir de lo que hacen.

• Que en oposición a la producción de eventos grandilocuentes como los que realizan las grandes corporaciones del entretenimiento y de la comunicación, además de las instituciones de gobierno, se encuentren mecanismos y formatos más modestos, pero más constantes para presentar y promover la cultura popular.

• Que los festivales que se autodenominen como culturales incluyan un programa de música mexicana.

Estas son mis consideraciones sobre los temas que deben tratarse a la hora de pensar en un conjunto de leyes o regulaciones sobre la vida cultural en nuestro Estado y en nuestro País.